La situación económica en la Argentina es complicada y el gobierno nacional está buscando la forma de mejorar las circunstancias para los ciudadanos. En este contexto, Sergio Massa, ministro de Economía, anunció un paquete de medidas económicas para sostener el consumo y aumentar la inversión.
Qué se va a anunciar
El objetivo de esta serie de medidas es fortalecer el crédito del sector privado y mejorar el marco normativo. Entre ellas, están incrementar el 30% en los montos de compras en cuotas con tarjetas de crédito; y el 25% para los pagos en una sola cuota.
Además, aumentarán en un 25% los márgenes de adelanto en cuenta corriente a las empresas del programa MiPymes: por lo tanto, quienes paguen con tarjeta de crédito tendrán la alternativa de financiamiento con un límite mayor, tanto en cuotas como en efectivo.
Según aseguraron desde el Ministerio de Economía, el foco de estas medidas es que las familias argentinas tengan mayor acceso al crédito, pudiendo comprar hasta un 30% más, ya que por cada 10 mil pesos disponibles para comprar en un pago, se sumarán 3.000 más disponibles. Agregaron que esto beneficiaría a alrededor de 20 millones de personas.
En este sentido, con el programa Ahora 12, los ciudadanos podrán acceder a más bienes y servicios, aumentando el consumo general del país.
Los programas Ahora 12, 3, 6, 10, 18, 24 y 30 funcionan para financiar compras en cuotas fijas mensuales, y sostienen el consumo de las ventas minoristas en el país. Ahora 12, que cuenta con cuotas subsidiadas, es el más popular, ya que mantiene los costos de financiamiento por debajo de lo que paga el resto del mercado.
Hace algunas semanas, Massa tomó otra serie de medidas, entre las que se encontraba bajar la tasa de interés para las compras en cuotas del programa Ahora 12. El gobierno decidió bajar 9 puntos porcentuales la tasa para las compras con este plan, pasando del 82,45% al 72,75%.
Otras medidas
Además de las mencionadas previamente, se le suman otras modificaciones en el marco normativo, con el objetivo de promover la canalización de los ahorros de los ciudadanos hacia el crédito –a través de la fijación de tasas mínimas, entre otras medidas–, lo que contribuiría a mejorar las condiciones de financiación para las empresas y las personas.